
El cónclave de 2025 ha comenzado en el Vaticano, marcando un momento crucial para la Iglesia Católica tras el fallecimiento del Papa Francisco. Este proceso de elección papal se desarrolla en un contexto de incertidumbre y expectativas, con diversos candidatos y desafíos que podrían influir en el futuro de la institución.
Inicio del cónclave de 2025 y ceremonia inaugural
El 7 de mayo de 2025, los 133 cardenales electores se reunieron en la Basílica de San Pedro para la misa “Pro eligendo Pontifice”, presidida por el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio de Cardenales. Durante la homilía, Re enfatizó la necesidad de “unidad” y “comunión” en la Iglesia, subrayando la responsabilidad de elegir al nuevo pontífice conforme a la voluntad divina. Sin embargo, llamó la atención la omisión de cualquier mención al Papa Francisco, interpretada por algunos como una señal de distanciamiento del legado reformista del pontífice anterior. Además, Re felicitó públicamente al cardenal Pietro Parolin, actual secretario de Estado y considerado uno de los principales candidatos, lo que ha sido visto como una investidura informal que podría influir en la dinámica del cónclave.
Participación y ausencias en el cónclave de 2025
De los 135 cardenales con derecho a voto, dos no participarán por motivos de salud, reduciendo el número de electores a 133. Entre las ausencias destacadas se encuentran el cardenal español Antonio Caňizares, arzobispo emérito de Valencia, y el cardenal bosnio Vinko Puljić. Esta reducción implica que el nuevo Papa deberá obtener al menos 89 votos, equivalentes a dos tercios del total, para ser elegido.
Perfil de los principales candidatos en el cónclave de 2025
El cónclave de 2025 se caracteriza por la ausencia de un claro favorito, con varios cardenales emergiendo como posibles sucesores de Francisco. Entre ellos se destacan:
- Pietro Parolin: Actual secretario de Estado del Vaticano, es considerado el principal candidato, con un respaldo inicial de aproximadamente 40 votos. Su perfil diplomático y experiencia en la Curia lo posicionan como un candidato de consenso.
- Jean-Marc Aveline: Arzobispo de Marsella, conocido por su enfoque pastoral y compromiso con el diálogo interreligioso.
- Mario Grech: Secretario general del Sínodo de los Obispos, reconocido por su labor en la promoción de la sinodalidad en la Iglesia.
- Robert Prevost: Prefecto del Dicasterio para los Obispos, con experiencia en la gestión de la Iglesia a nivel global.
- Pablo Virgilio David: Obispo de Kalookan en Filipinas, cuya reciente consideración como candidato ha sorprendido a muchos, reflejando la diversidad y globalidad de la Iglesia.
Proceso y desafíos del cónclave de 2025
El cónclave se desarrolla en la Capilla Sixtina, donde los cardenales votan en secreto hasta alcanzar un consenso. Se realizan hasta cuatro votaciones diarias, con fumatas negras o blancas que indican el resultado de cada ronda. La falta de un candidato claro y las divisiones internas podrían prolongar el proceso más allá de las cinco votaciones habituales. Además, la omisión del Papa Francisco en la homilía inaugural y las felicitaciones a Parolin han generado tensiones, especialmente entre los cardenales progresistas que temen un giro conservador en la dirección de la Iglesia.
Impacto y proyecciones futuras del cónclave de 2025
La elección del nuevo Papa en el cónclave de 2025 tendrá un impacto significativo en la dirección futura de la Iglesia Católica. Las decisiones tomadas en este proceso reflejarán las prioridades y desafíos que enfrenta la institución en un mundo en constante cambio. La comunidad católica global sigue de cerca el desarrollo del cónclave, esperando que el nuevo pontífice pueda unificar y guiar a la Iglesia en los años venideros.
Para más información sobre el desarrollo del cónclave y las últimas actualizaciones, puede consultar las siguientes fuentes: